Una sorpresa

Y estaba ya desesperada, tenia tantas ganas de sentirle dentro de mi, que hasta soñaba escenas eróticas, de esas que te hacen levantarte peor de lo que te acostaste.

Habíamos estado unos días sin poder disfrutar de nuestros cuerpos, y ya creí que me iba a morir! 

Estábamos en el sofá, como siempre, cuando me acerque insinuándole lo que quería, él como siempre, me vino con excusas, y ya le tuve que recordar la cuenta de los días que me había dejado sin sexo, y que como pasara un día mas, me iba a tirar a el primero que se me insinuase! y me fui con mi mosqueo a la cama...

No me hizo esperar mucho, vino a dormir conmigo. Junto su pecho a mi espalda,  me abrazo fuerte y con su mano, empezó a acariciarme los pechos. 

Estaba muy excitada porque llevaba días soñando guarradas, así que no me pude resistir nada, y me precipite rápidamente sobre él y le quite la ropa que llevába. Parecía desesperada, necesitaba que me follara, que me empujara tan fuerte que me hiciera gritar como una loca, y así fue, creo que fue la vez que menos dure en mi vida, tal y como me embistió, no lo pude soportar, y me corrí como si hubiera tenido meses de abstinencia, apenas lo pude disfrutar, pero... esta vez, tuve una sorpresa... él, no se corrió, aunque lo hubiera podido hacer. Y me dijo,  - puedes con otro? - QUE SI PUEDO CON OTRO!!!??? por dios, pensé que nunca me lo dirías! ahí fue cuando empezó mi noche.

Follamos hasta las tantas, me repetía que si quería nos quedábamos toda la noche haciéndolo, hasta que yo quisiera. Y sude como hacia mil que no sudaba! ya decía yo que me sobraban kilos, y es que hacia tiempo que no me pasaba algo así.

Y yo me pregunto, ¿Seguro que no me lo han cambiado? a ver si tiene un hermano gemelo...  

Foto prestada por: http://lunaylobo-quidprocuo.blogspot.com/